8.07.2013

Hoy quiero escribir sobre ti…


No te conozco y sin embargo, sé muchas cosas de ti
 

No sé tu segundo apellido, pero sé pronunciar tu nombre al derecho y al revés, deletrearlo, decirlo al revés y encontrar al menos 9 palabras que riman con él...
 
Nunca me has dicho más de 8 palabras seguidas y no obstante te he escuchado hablar hasta por los codos...

Jamás te he visto un fin de semana, pero puedo recitar al menos 7 de las cosas que sueles hacer los sábados y domingos.
 
Nunca te he contado un chiste, pero sé cuánto dura tu carcajada hasta antes de que empieces a ahogarte.
 

No somos amigos, pero a veces creo que yo también detesto a tus enemigos.
 
Nunca hemos salido, pero sé que nos pelearíamos por pagar la cuenta si lo hiciéramos y, al final, nos echaríamos un volado para no herir egos.

Detesto todos los estereotipos en los que caes por tu forma de ser, todos sin excepción y, no obstante, me gustaría platicar contigo al menos 2 horas sin temor a experimentar en carne propia la ejecución de esos odiosos estererotipos.
 
Jamás he sido aficionado de los helados de sabores mezclados, pero te vi tantas veces relamer el vasito que en alguna ocasión me compré uno para conocer el sabor y, en efecto, sigo sin ser aficionado.

Aborrezco esas canciones ñoñas de James Blunt que tanto te gustan y, sin embargo, cada vez que veo Back to Bedlam en una tienda te imagino tarareando sus tonadas.
 

Me fascina la sensación que circula por mis ojos cuando te veo llegar a lo lejos aunque tú ni te des cuenta.

Me encanta cómo usas tu sonrisa para conseguir en 4 segundos lo que otras chicas necesitan 17 minutos de argumentos para aspirar a lograr (casi siempre sin tu éxito).


Después de todo esto, que además sé que no leerás, solo puedo morderme los labios y pensar que no hay peor castigo sobre la faz de este planeta que querer a alguien desde el silencio del anonimato... Y sin embargo, lo hago.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No cabe duda, eres y siempre serás del clan de los amorosos, ya que como dijera Jaime Sabines:
" [Los amorosos]saben que nunca han de encontrar.
El amor es la prórroga perpetua,
siempre el paso siguiente, el otro, el otro.
Los amorosos son los insaciables,
los que siempre -¡que bueno!- han de estar solos.
Los amorosos son la hidra del cuento".

Anónimo dijo...

No cabe duda, eres y siempre serás del clan de los amorosos, ya que como dijera Jaime Sabines:
" [Los amorosos]saben que nunca han de encontrar.
El amor es la prórroga perpetua,
siempre el paso siguiente, el otro, el otro.
Los amorosos son los insaciables,
los que siempre -¡que bueno!- han de estar solos.
Los amorosos son la hidra del cuento".